Un dragón cubano

¡Cuéntale a los demás!

Comienza el Año Nuevo Chino: Dragón de Madera. Según lecturas será muy bueno pues impulsará oportunidades y fortalezas para emprender. También será un buen año para la salud siempre y cuando se trabaje en ella.

Tratándose de los chinos agregaría que hay que trabajar en la salud de una manera holística, combinando la medicina tradicional y ancestral con el equilibrio mental (muy poderoso), la fortaleza emocional, una alimentación que sea eso y no comida chatarra, y un buen programa de ejercicios físicos. Quien escribe lo certifica, si eso sirviera de referencia.

Pudiéramos seguir en este apasionante tema pero como el asunto coteño es la música, vamos.

El pasado jueves 8 se cumplieron 19 años de la partida física del excepcional músico y defensor de sus raíces africanas, Lázaro Ros, de Cuba. Ros siempre supo que las raíces filosóficas (y otras) venían desde África, no desde España (con lo que eso implica). Como será este tema que Lázaro nació en 1925 y partió en 2005 (el 5 de Oshun, su Madre Yoruba).

Su mérito, sin embargo, no fue sólo contribuir a salvar la memoria de esta sabiduría. Además de ser fundador, en 1963, del Conjunto Folclórico Nacional de Cuba y de llevar la voz de los Orishas por más de 50 países del mundo, Lázaro Ros fue generoso siempre y prestó su voz y sus conocimientos a proyectos que fusionaron la música afrocubana con el rock -junto a Carlos Alfonso en el grupo Síntesis, y a Pablo Menéndez en Mezcla- y con el jazz, con Chucho Valdés, con quién grabó varios que fueron nominados a los premios Grammy.

Compartió escenario con Carlos Santana y otros grandes de la música interesados por las raíces y los ritmos afrocubanos. Solía decir: «hay muchos intelectuales que ven con más admiración el arte europeo clásico: nosotros también somos clásicos».

“Hay muchos que te dicen que no creen en ná…”

Lil Rodríguez

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