Evocando a Canchunchú

¡Cuéntale a los demás!

Este viernes 19 se cumplieron 116 años del natalicio de Luis Mariano Rivera, pieza fundamental en el rompecabezas de nuestra musicalidad.

Ahora, cuando observamos cómo los pobladores de El Callao se plantaron para decretar el Año Jubilar de la negra Isidora Agnes, la que lo dio todo por preservar la tradición total de su pueblo uno se pregunta dónde estuvo el Año Jubilar de Luis Mariano y dónde está el seguimiento cultural que nos permita hacer el inventario de tan valiosas efemérides.

Este año Serenata Guayanesa arribó a sus cincuenta años, y Un Solo Pueblo festeja sus 45 años de lucha por el rescate y divulgación de lo que no sabíamos que teníamos: ¡la maravilla!

Pero es que también este año esa Bandera Nacional Cantante que es Los Guaraguao llega a sus 50 años y de igual manera la gloria inmensa de grupo que es y significa 1,2,3 y Fuera también llega a su Cincuentenario. No es justo que observando el esfuerzo de valoración que hacen algunos organismos e individualidades dejemos perder la memoria, y con ella nuestra autoestima como nación descendiente directa de los Caribe, (porque ésto va más allá de Bolívar).

El tema del progreso no pasa por una carretera casi siempre mal asfaltada, ni pasa por obligaciones que siempre nos han vendido como favores (y que hay que agradecer). El tema del progreso pasa por el orgullo, la autoestima y por saberse venezolano porque nos sabemos a Venezuela de memoria, palmo a palmo, libro a libro, ritmo a ritmo, lucha a lucha.

Por nuestro amado oriental Luis Mariano Rivera, por lo que significó su canto campesino y reivindicador no podemos dejar en el olvido a quienes dieron y dan la pelea de nuestra genuina cultura, y dejarlos en silencio mientras malos y alienados músicos hacen su agosto en la conciencia de una población juvenil que no ha aprendido a tomarse la caña de la historia.

Lil Rodríguez

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