Héctor Myerston, Tomás Henríquez, y otros actores y locutores, varones y mujeres intervenían en aquella gloriosa colección del Ministerio de Educación dedicada en discos a las batallas de la independencia continental.
De la Batalla de Ayacucho se cumplen este sábado 199 años de heroísmo. Es decir, entramos en el año Bicentenario de la Gloria de Antonio José de Sucre, el Gran Mariscal, el gran diplomático, el eterno y leal amigo de Simón Bolívar, el cumanés inmortal.
Lo dejamos al vuelo para que no se nos quede en el tintero tanta emoción, sobre todo para los hijos del estado que lleva su apellido, y los orientales todos.
También es cierto que hay efemérides vinculadas a la música popular que debemos atender. Por ejemplo a Dámaso Pérez Prado, quien nació el 11 de diciembre de 1916, en Matanzas, Cuba, y quien fue un tremendo pianista, arreglista y Director orquestal. Fue pianista nada menos que de la Casino de la Playa. Trasladado a México, Pérez Prado aprovechó el entorno y el contexto y se convirtió en un verdadero propulsor del Mambo, siendo ese su inicio a la popularidad mundial.
El otro es nada menos que Rafael Cortijo, el gran Revolucionador de la comarca caribeña, el que privilegió los ancestrales sonidos de Borinquen aún sobre la salsa misma. Cortijo nació el 11 de diciembre de 1928 nada menos que en Santurce, San Juan, Puerto Rico. Percusionista desde el vientre materno, Rafael Cortijo hizo aportes demasiado importantes a la música caribeña a partir de la Bomba y la Plena, y de su compadre Ismael Rivera.
El detalle luctuoso es el fallecimiento, el 11 de diciembre del año 2000 de Yayo El Indio, cuyo nombre real era Eladio Gabriel Peguero. Yayo falleció en Nueva York pero sus restos fueron trasladados a su natal Puerto Rico. Tuvo, como músico el mérito de ser un corista excepcional, con dedicación y altura.
Lil Rodríguez
Muy buena reseña…
Gracias señora Lil Rodríguez, un abrazo y mis respetos