Eduardo Parra Istúriz – Agencias
(RCA – 29/09/2022) Este miércoles se inauguró en Ciudad de México la Conferencia Mundial sobre Políticas Culturales y Desarrollo Sostenible, Mondiacult 2022, con la asistencia de 161 delegaciones que representan a igual número de países.
El evento está presidido por la francesa Audrey Azoulay, directora general de la Organización de Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco), entidad que convoca el encuentro. Éste durará tres días y se espera que de él surgan nuevos acuerdos y papeles de trabajo alrededor de cuatro ejes principales:
- El tráfico ilegal de bienes culturales.
- La vulnerabilidad de los profesionales de la cultura.
- Las plataformas informáticas
- El Patrimonio Cultural.
Además de Azoulay, destacan en la directiva del Mondiacult 2022 Alejandra Frausto, titular de la Secretaría de Cultura Federal, y Claudia Sheinbaum, jefa de Gobierno de la Ciudad de México. Durante el acto inaugural y en representación del presidente mexicano Andrés Manuel López Orador, se hizo presente la escritora Beatriz Gutiérrez Müller, esposa del mandatario.
La Unesco desaprueba el libre mercado cultural
Audrey Azoulay mencionó que Mondiacult es una ocasión para movilizar a la comunidad internacional en servicio de la cultura y de transmitir el mensaje de que ésta es un bien mundial, destacando que en estos momentos destacan tres retos: “El tráfico ilícito de bienes culturales y las restituciones, fomentar la investigación sobre los bienes culturales, y regular el mercado del arte”.
La directora general de la Unesco cree que, la política cultural del mundo no puede dejarse en manos del mercado, máxime en tiempos de globalización; por lo tanto, se requiere cada vez más cooperación internacional.
Igualmente, planteó que Mondiacult 2022 será decisiva para la cooperación internacional en esta materia, proyectandose hacia el año 2030: “La declaración final marcará una nueva etapa para que la cultura sea tomada en cuenta en las agendas, que sirva para abrir una nueva página, una nueva página que vamos a escribir juntos”.
México habló globalmente, con mirada local
Alejandra Fausto, en consonancia con las reivindicaciones históricas que comparten México y buena parte del continente americano, planteó la necesidad de detener la apropiación cultural, el tráfico ilícito y la comercialización de bienes culturales.
Destacó además «la vulnerabilidad de los profesionales de la cultura, que en la crisis sanitaria costó unos 10 millones de empleos culturales”.
Por su parte, Gutiérrez Müller destacó que la cultura ajena “no se apropia con fines económicos, no se subasta; el plagio es ilegal e inmoral y los bienes patrimoniales de la humanidad son de todos y todos debemos protegerlos (…), se debe apostar por descolonizar la cultura supremacista y promover una horizontalidad, porque no hay culturas superiores ni inferiores”.
Afrimó la escritora que “el racismo es una pandemia irracional que no hemos podido exterminar” y en el ámbito cultural “reduce la creación y el arte a modelos clasistas o elitistas que menoscaban a los que creen inferiores. Hay que hacer entender que, al agredir a otro, se agreden a sí mismos, a la cultura universal”.
Finalmente, la jefa de Gobierno de la ciudad, Claudia Sheinbaum, destacó que la ciudad que gerencia es un “crisol de distintas culturas del mundo”, donde han arribado migraciones durante siglos. Desde su punto de vista, “esta reunión es un grito por la paz que se desarrolla a través de la cultura”.
Se esperan las declaraciones finales para este viernes, cuando culminen las mesas de trabajo.
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