Eduardo Parra Istúriz
(RCA – 10/05/2023) Este lunes, 8 de mayo, falleció en su residencia de São Paulo la cantante brasileña Rita Lee, un verdadero ícono de la música brasileña, así como una luchadora formidable contra la dictadura y en favor de la causa feminista.
El anuncio fue hecho el martes por sus familiares, quienes emitieron un breve comunicado en sus redes sociales: “Anunciamos el fallecimiento de Rita Lee, en su residencia en São Paulo, a última hora de la noche de ayer, rodeada del amor de toda su familia, como ella siempre quiso”.
La causa de su muerte tuvo que ver con secuelas de un cáncer que se trató entre 2021 y 2022. En febrero debió ser hospitalizada por esa razón. También comunicaron que su velorio, que se efectúa hoy, será abierto al público. «De acuerdo con su voluntad, su cuerpo será cremado».
Por su parte, el gobierno brasileño ha decretado tres días de duelo oficial en reconocimiento a la cantante. “Rita Lee Jones es uno de los nombres más grandes y brillantes de la música brasileña”, escribió el presidente Inácio Lula da Silva: “Una artista adelantada a su tiempo. Pensaba que el título de Reina del Rock era inapropiado, pero el apodo hace justicia a su trayectoria”.
La historia de Rita Lee
Rita Lee Jones nació en São Paulo el 31 de diciembre de 1947 y, al principio, se dedicó a versionar a Los Beatles, pero pronto encontró su propio rumbo en el grupo Os Mutantes, que la trasladó desde la música anglosajona hacia el Tropicalismo, un movimiento que se enfrentó a la dictadura mediante la música de fusión brasileña.
Luego siguió como solista y en sus 50 años de carrera profesional llegó a publicar más de 30 discos, y en 2001 obtuvo el Grammy Latino al Mejor Álbum de Rock Brasileño, por su disco 3001. En 2022, la Academia Latina de Grabación la reconoció con el premio a la Excelencia Musical. Vendió 55 millones de copias en esas cinco décadas.
En el mundo sociopolítico, fue una rebelde que asumió como propias muchas de las ideas feministas: «Yo era la única chica roquera en medio de un club solo de hombres, cuyo mantra era: para hacer rock tienes que tener cojones. Yo fui con mi útero y mis ovarios y me sentí igual a ellos, les gustase o no», puede leerse en su autobiografía.
Sus canciones, que hablaban de sexo, amor y libertad, fueron consagrados como símbolos feministas. Le gustaba ser conocida como «Patrona de la libertad».