Comenzamos por este 4 de mayo, fecha de absoluta celebración en la isla de Margarita, pues ese día pero en 1810 la provincia insular se sumó a la causa independentista iniciada en Caracas el 19 de abril. Siempre hay festejos, y cayendo en sábado, más.
Y este viernes fue el día de la Cruz, Cruz de mayo, Cruz del Sur en el cielo astronómico, Cruz de festejos y rituales en la tierra.
La Santa Cruz de Pacairigua, en Guatire fue festejada, al igual que las cruces colocadas como monumentos en Caracas, La Guaira, Los Valles del Tuy, en todo el país y más allá porque hasta en Holguín, Cuba una gigantesca Cruz preside a esta ciudad oriental cubana.
Tambien este viernes (y continúa este sábado) miles de cruces son hechas, vestidas, adornadas y cantadas.
La Cruz de mayo es un buen ejemplo de la Diversidad Cultural y de la preservación de tradiciones aún cuando los creyentes o portadores de esa tradición se tuvieran que trasladar a medios urbanos en busca de mejores circunstancias. De ahí que en pueblos del interior de nuestro país y en barrios de las grandes ciudades esté vigente y permanezca por la devoción y la tradición.
Música hay a granel para festejar la Cruz. Desde los cantos orientales con galerones, fulías, jotas y polos hasta los del llano donde Florentino, el que cantó con el diablo vio en la noche oscura la Cruz de mayo en el cielo. Se tapará la cruz y vendrá el rompeduelo. En Falcón, Lara y Yaracuy también habrá festejos, si es que hasta Alí Primera decía: “A mi crucita de mayo le puse su florecita…”. La costa, por supuesto no se queda atrás y con retumbe de tambores anuncian sus alegrías.
Es probable que comience a llover. Las chicharras anuncian, pues y como cantaba Carlos Quintana “Tabaco”: “Agua de mayo, pa refrescar el ambiente”. Agua bendita para la madre tierra, para los frutos y para la alegre esperanza.
Excelente como siempre tus artículos.