A esta pobre mujer rica se le olvidó cuando Donald Trump, luego del paso de un devastador huracán sólo les arrojó desde el aire papel tualé para que se lo comieran o se limpiaran el trasero.
A esta pobre mujer rica se le olvidó que tuvo una predecesora con los ovarios bien puestos, que defendió al idioma español frente a la pretensión de implantar el inglés como idioma oficial de una isla caribeña, con historia heroica. A lo mejor Sila Calderón tuvo fallas pero se fajó con el idioma y el estatus de Puerto Rico buscando más soberanía mientras esta pobre “gobernadora” entrega la historia de su país a la hipoteca de un gobierno que cada día humilla la memoria de Pedro Albizu Campos.
No sabe esta pobre mujer gobernadora de Puerto Rico que haga lo que haga no declinaremos en la América Latina que siempre ha acompañado al ala que cayó al mar.
El presidente venezolano, mi presidente, (para que no haya dudas) Nicolás Maduro retó a la pobre rica gobernadora de Puerto Rico a que avance hacia Venezuela. Ella no puede imaginar lo que le espera con las manos femeninas de la Patria de Bolívar.
No se atreverá. Las chapucerías mediáticas terminan ahí en las palabras, pero en Venezuela sí sabemos lo que es alcanzar la paz a través de la fuerza. Que nadie se equivoque porque Simón Bolívar sigue vivito y coleando, por si acaso. No solo quieren al presidente, está claro que quieren el petróleo y, más allá, quieren a Bolívar y a Chávez. No podrán.
Tenemos hermanos mayores además de nuestras fuerzas ancestrales. A ver si saben quién es María Lionza.
No declinaremos en nuestro amor por Puerto Rico, el ala que no ha podido volar y cantamos con Alí Primera:
“Tu solitaria estrella
con alfileres de lucha
se va clavando en tu piel
y es deber del borincano
dar corazón y manos
para no verla brillando
como otra más
en otra bandera.”
